¿Qué es el espolón calcáneo?

 En Enfermedades, Pie, Tratamientos

Un espolón calcáneo es un recrecimiento óseo que se forma en el hueso del pie denominado calcáneo, que forma el talón, con forma de gancho o pico.

Tiene una incidencia relativamente alta, ya que aproximadamente entre un 10% y un 15% de la población lo padece, habiendo una mayor cantidad de mujeres que lo sufren con respecto a hombres. Suele presentarse más frecuentemente entre los 40 y los 60 años.

Este crecimiento óseo puede aparecer por una inflamación en la inserción de la fascia plantar en el talón. Si esta inflamación sigue se pueden formar depósitos de sales de calcio o ácido úrico que a largo plazo van a dar lugar al espolón.

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Algunos factores de riesgo que influyen en la inflamación de la fascia plantar son:

  1. La edad: Distintas alteraciones son provocadas por el proceso de envejecimiento.
  2. Sobrepeso: Debido al exceso de peso, el arco del pie sufre mayor presión y, por consecuencia, la fascia plantar estará sometida a continuas tracciones.
  3. Enfermedades reumáticas como la artritis, que favorecerán la aparición de depósitos de sustancias.
  4. Problemas posturales o de pisada, como los pies planos o alteraciones de la marcha.
  5. Aumento de la actividad física o por realización de actividades repetidas.

Se sabe que en todas las patologías, el factor clave a la hora de recuperar y mejorar, es la actitud que el paciente tenga hacia su lesión.

Nosotros, como fisioterapeutas, podemos actuar e identificar qué está provocando la disfunción o dónde hay que centrar la atención durante la rehabilitación. Trabajaremos tanto los factores intrínsecos a la lesión (como puede ser la inflamación de los tejidos, la tensión en la fascia plantar…), como los factores extrínsecos. Estos factores extrínsecos son aquellos que, identificándolos y tratándolos, nos van a ayudar  durante el proceso de rehabilitación y a prevenir que aparezca una recidiva.

Análisis de la marcha, la pisada, consejos posturales y ejercicio son algunos de estos factores en los que, desde la fisioterapia, trabajaremos para abordar la lesión desde todos sus perfiles y de la manera más global posible.

El trabajo en casa siguiendo los consejos que da el fisioterapeuta, realizando ejercicios domiciliarios y los estiramientos indicados, es de carácter esencial en el proceso de rehabilitación.

Como hemos comentado anteriormente, la actitud del paciente es fundamental, ya que una actitud positiva y un grado alto de implicación van a hacer un gran porcentaje de la recuperación.

 “La mejor farmacia está en el cerebro de uno mismo”.- Juan Torrontegui.

 

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