La importancia de cuidar el suelo pélvico
En los últimos años habrás escuchado en varias ocasiones el término «suelo pélvico». Seguro que si has estado embarazada habrá llegado a tus oídos, bien por parte de tu matrona, una amiga o en tu entorno más cercano, pero… ¿realmente sabes qué es?
Es importante conocer nuestro cuerpo y saber un poquito de anatomía (pinceladas muy fáciles) para llegar a comprender cómo funciona nuestro organismo, porque cuando sabemos como trabaja nuestro cuerpo podemos ayudarle a que funcione mejor. vamos a profundizar un poco en este aspecto.
¿Dónde se localiza?
El suelo pélvico está situado en la parte inferior de nuestra pelvis, entre el pubis y coxis, rodeando la vulva y el ano (como si la tapizaran). Está formado por un conjunto de músculos y por tejido conectivo, este último muy rico en colágeno. El colágeno es lo que da soporte y ayuda a dar sujeción a los tejidos, evitando así que se “descuelguen”.
Toda esta “malla” muscular está dispuesta en forma de paracaídas o cúpula y encima de ella situamos a los órganos pélvicos que en el caso de la mujer son la vejiga, el útero, la vagina y el recto.
¿Por qué es tan importante tener un buen tono del suelo pélvico?
Disfrutar de un suelo pélvico en buenas condiciones es muy importante. Sus funciones principales son las siguientes:
- Función de continencia: la vejiga y el recto son órganos que cambian su tamaño según estén más llenos o vacíos (orina, heces y gases). El suelo pélvico tiene un papel importante para garantizar el cierre de los esfínteres tanto durante el llenado y la apertura como durante el vaciado, evitando así esos incómodos “escapes” o pérdidas.
- Soporte de los órganos pélvicos: imagínate el suelo pélvico como si fuera una colchoneta hinchable sobre la que reposan la vejiga, útero y recto. Si esta colchoneta se va deshinchando (el suelo pélvico se va debilitando), de modo que estos órganos ya no estarán correctamente posicionados y tenderán a descender. Su función se verá alterada y ésto nos podrá dar problemas en el futuro, como por ejemplo: incontinencia urinaria, fecal, de gases o prolapsos entre otros.
- Función sexual: el orgasmo provoca una contracción explosiva e intensa de nuestro suelo pélvico. Si tenemos un buen tono del suelo pélvico podremos disfrutar de forma más intensa y placentera de nuestras relaciones sexuales ya que habrá mucho más rozamiento en la penetración y esto significará más placer para la pareja.
- Función reproductiva: el periné será la ultima barrera que deberá cruzar la cabeza del bebé en el momento del parto.
Fisioterapia pelviperineal
La fisioterapia pelviperineal o fisioterapia del suelo pélvico es una disciplina terapéutica que permite evaluar y tratar las patologías y disfunciones relacionadas con el suelo pélvico, incluyendo la esfera sexual que acompaña a la mujer en el postparto y la menopausia. También al hombre después de cirugías de próstata.
Pero lo más importante, recuerda que conocer y cuidar nuestra musculatura del suelo pélvico, sobre todo de forma preventiva será nuestra mejor herramienta para evitar esos “problemillas” que a tantas mujeres afecta (tanto si han dado a luz o no).
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